La historia reciente del país en cuanto a los anuncios que realiza el Presidente, si analizamos la prensa de hace años, resulta asombroso ver cómo cada tantos meses, el Gobierno anuncia algo que ya se ofertó en años anteriores, como si fuese algo fresco, generando de nuevo frustración en el pueblo. Si el Gobierno no puede unir al país en aras de la solución de los problemas, entonces será incapaz de resolver la crisis de la vivienda en Venezuela.
En materia de leyes, el Presidente, tiene la Ley de Expropiación por causa de utilidad publica o social, la Ley de Tierras Urbanas y la Ley de Regulación Integral de la Tenencia de las Tierras y de los Asentamientos Urbanos, todos estas leyes le permiten al gobierno un marco jurídico amplio para construir viviendas y ahora acaban de aprobar otra Ley Especial de Tierras en el marco de la Ley Habilitante.
El secretario general nacional de Primero Justicia Tomás Guanipa indicó que el gobierno no ha podido resolver la crisis de viviendas en el país y en ese sentido propuso que realice un gran acuerdo nacional con el sector privado para solucionar la crisis habitacional.
El presidente de la Asociación Bancaria de Venezuela, Juan Carlos Escotet, propuso un plan para la construcción de un millón de viviendas en un plazo de cuatro años en un acuerdo tripartita entre el Estado, los constructores y la banca privada.
El presidente Chávez, pidió al pueblo que tenga "paciencia" y espere que su Gobierno ponga en práctica una ley para tomar terrenos urbanos ociosos y construir en ellos viviendas, al negar que haya ordenado unos intentos de invasión en un municipio caraqueño opositor.
Pero los discursos del Presidente, invitan a los damnificados a buscar terrenos y galpones desocupados, esto promueve las invasiones, y eso no resuelve los problemas de la gente. Muchas personas, no damnificadas, han aprovechado el momento para ellos también conseguir una casa propia, ubicándose en los hoteles y en otros recintos designados para acoger a los damnificados. El Presidente no convoca a los alcaldes y gobernadores para que entre todos se busquen las mejores soluciones.
Gente que vive en zonas no afectadas, o parcialmente afectadas se han dirigido en nombre de los discursos del Presidente Chávez, a ocupar terrenos y construcciones de propiedad privada sin aviso. En Caricuao un galpón y el terreno adyacente está lleno de gente que lo invadió, esperando el apoyo y las casas prometidas por el gobierno para este nuevo año, muchos, como Erwin Cruz, invasor, asegura que no se irá, porque así no le den la casa, apartará su terreno para él mismo hacer su rancho en la zona.
En el barrio Mamera, toda una familia se dirigió a distintos hoteles del centro capitalino para tener la oportunidad, al igual que los damnificados, de que al hacerles el estudio socioeconómico y ver que no tienen títulos de propiedad y que ganan poco dinero, les den una casa propia, como es el caso de María Rodriguez Landaeta, quien se fue con su hija de 8 meses de edad y con su esposo a un hotel ubicado en Parque Carabobo, ellos pasan el día fuera y regresan antes de las doce de la noche para conservar su habitación y no ser desalojados.
En el 2008 el Presidente expropió las cementeras usando como excusa el hecho de que las estatizaciones iban a dinamizar la producción de viviendas, resulta que desde la confiscación de las cementeras, menos casas se construyen en Venezuela.
En definitiva debe existir voluntad y efectividad de ambas partes para asumir y sacar adelante políticas públicas que resuelvan el problema, y asíi atacar el déficit de viviendas en el país. También sensibilidad social para entender que para construir más de dos millones de viviendas que hacen falta, tiene que haber un gran acuerdo nacional entre empresa privada y gobierno para impulsar la construcción de soluciones habitacionales.
Cerro de Mamera...
